diumenge, 5 de juny del 2016

Comentario "A Dafne huyendo de Apolo"

COMENTARIO DE TEXTO A DAFNE HUYENDO DE APOLO POR FRANCISCO DE QUEVEDO



Tras vos un Alquimista va corriendo,
Dafne, que llaman Sol ¿y vos, tan cruda?
Vos os volvéis murciégalo sin duda,
Pues vais del Sol y de la luz huyendo.

Él os quiere gozar a lo que entiendo
Si os coge en esta selva tosca y ruda,
Su aljaba suena, está su bolsa muda,
El perro, pues no ladra, está muriendo.

Buhonero de signos y Planetas,
Viene haciendo ademanes y figuras
Cargado de bochornos y Cometas.

Esto la dije, y en cortezas duras
De Laurel se ingirió contra sus tretas,
Y en escabeche el Sol se quedó a oscuras.
                                                                                  

Comentario:

A Dafne huyendo de Apolo es un soneto escrito por Francisco de Quevedo y Villegas, un poeta madrileño del siglo XVII, que poseía un gran talento literario en prosa y verso. También era conocido por su enorme cultura y su implicación crítica en la política de los Austrias. Acudió al libro I de las Metamorfosis de Ovidio con la intención de aprovechar la conocida persecución de Dafne por el dios Apolo plasmada con todo lujo de detalles en el momento de su transformación en laurel. Además acudió al soneto de Garcilaso de la Vega que enfocaba de un modo más renacentista  esta escena de Dafne transformándose en Laurel, Garcilaso se idealiza en este mito mediante la frustración amorosa de Apolo con la suya propia con Isabel Freyre. Quevedo usó este mito para avisar al lector sobre la perturbación del poder regente de su época.

El poema trata sobre una persecución, Apolo  que persigue a Dafne, con fines únicamente sexuales, pero después, Dafne se transforma en un Laurel defraudando así a su perseguidor. En este poema hay muchas simbologías que habría que analizar una por una. La voz poética empieza diciendo que a Dafne la persigue un “alquimista”, aquel que se afana por convertir la flecha de plomo que tiene clavada Dafne en oro, que es la flecha que a él le ha clavado Cupido. Después, se sorprende de que Dafne se mantenga “cruda”, un adjetivo que hace verla como pura carne, un objeto sexual. Luego la compara con un murciélago, ya que está huyendo y escondiéndose de Apolo que es el dios del Sol, jugando con ese doble sentido. A continuación expresa el deseo de Apolo de querer gozarla en una selva tosca y ruda. En el siguiente verso dice que su “está su bolsa muda, el perro, pues no ladra, está muriendo”, éste verso se refiere a una expresión popular “dar perro muerto” que significa tener relaciones con una prostituta sin pagarle. En el primer terceto, Apolo es “buhonero de signos y planetas” que significa que el sol (Apolo) sigue su órbita por los signos del zodiaco, a continuación dice que “viene cargado de bochornos y cometas”, el bochorno viene a que Dafne huye rápida cómo un cometa y Apolo está cansado de perseguirla. Por último, la voz poética le advierte, y Dafne se transforma en Laurel, dejando al “Sol a oscuras”, antítesis que utiliza el poeta refiriéndose a que lo deja desanimado, sin poder conseguir lo que quería. El tema principal de este poema es la crítica social que se hace mediante la desmitificación del mito clásico de Apolo y Dafne, con una clara actitud burlesca por parte del autor.

El poema consta de 14 versos endecasílabos (arte mayor), dividido en dos cuartetos y dos tercetos, por lo tanto con estructura de soneto. La rima es asonante durante todo el poema, con un esquema de ABBA ABBA CDC  DCD. Su transcurso es pausado, exceptuando el encabalgamiento que aparece en los versos 12 y 13, con motivo de finalización del poema. También hemos de destacar la frecuente aliteración del fonema “s” con la función de recrear un clima sigiloso, de persecución. Quevedo es capaz de marcar el ritmo que él desea mediante el abundante uso de hipérbatos, que forzarán al lector a adecuarse a las exigencias de lectura del poeta. Otro aspecto a resaltar es el uso de numerosos substantivos concretos a lo largo del poema, sobre todo en el momento de la descripción de los personajes, con el motivo de desmitificar, en este caso, al dios Apolo. El uso de adjetivos especificativos en el segundo cuarteto, tiene la función de resaltar y hacer más intenso el significado del substantivo (“la bolsa muda” o “la selva tosca y ruda”). Éste último, la selva tosca y ruda, hace referencia al tópico literario de locus amoenus, típico en la literatura renacentista. El laísmo presente en el primer verso del segundo terceto, puede aludir a la procedencia madrileña del autor, vulgarizando la frase, y en este caso rebajando el estatus social de Dafne. La primera parte del poema (dos cuartetos y un terceto) están escritos en presente, mientras que en el último terceto el poeta decide utilizar el pretérito imperfecto, indicando al lector que Dafne finalmente consigue huir de Apolo, y por lo tanto que finaliza entonces el poema. El léxico de éste, va desde cultismos como el “vos” del primer cuarteto, hasta el prosaísmo, tomando como a ejemplo la expresión “el perro, pues no ladra, está muerto” (también expresión típica de su ciudad natal) del octavo verso, con el mismo motivo de desmitificar tanto al dios Apolo como a la ninfa Dafne. Dicha desmitificación queda resaltada con la visión general del poema, observando como de la metáfora clásica del mítico cazador y de la inocente virgen, el autor consigue convertirlos en el patético exhibicionista y la mujer depravada, que se adecuan al marco histórico social del momento.

Es un poema corto, la dificultad de su comprensión indica que está dirigido a un público inteligente, que debe encontrar el sentido connotativo completo del texto para llegar a una comprensión total de éste. Quevedo consigue su finalidad a la hora de escribir esta obra, refiriéndome a su propósito de desmitificar la historia de Apolo y Dafne (ideal grecolatino). Logra que el mito pierda su valor religioso y doctrinal, y se transforme en una denuncia social de la situación que se vivía en el siglo, ya que el dinero se convertiría en el centro de toda actividad de la sociedad. A pesar de ser un poema sobre mitología griega, el poeta lo convierte en una versión adaptada a la cultura occidental del momento, de manera que sea bien acogido entre sus lectores.

2 comentaris:

  1. Genial la desmitificación del rey, no la de la ninfa q se vuelve Laurel.

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  2. Vence la mujer que se transforma en árbol y continúa la vida en la Tierra.

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